Bernini es uno de los artistas más conocidos de la historia y posiblemente el más importante del barroco, sobre todo por obras escultóricas como El Rapto de Proseprina, el Baldaquino de San Pedro, o diseños arquitectónicos como la plaza de San Pedro en el Vaticano o la Iglesia de San Andrés del Quirinal.
Pero hoy quiero hablaros de una de esas obras más desconocidas pero que no deja de ser una maravilla para nuestros sentidos, L’elefantino o el obelisco de la Piazza della Minerva, este magnífico monolito que procedía posiblemente de los «campos de Marte» y que a su vez estaba en la ciudad egipcia de Sais, en un templo de Isis, fue realizado en la dinastía XXVI, por Psametico II.
Alejandro VII ordena que se realice un diseño para sustentarlo, por lo que hay una gran disputa entre el Padre Dominico Paglia(el cual quería hacer una base con cuatro perros que rodeasen al obelisco, en honor a su orden de los Dominicos, Dominó canes «Perros del Señor) y Gian Lorenzo Bernini. Al final el proyecto de Bernini ganó y creó este fantástico diseño basándose en el texto del libro «El sueño de Polífilo»(1499), donde aparecía esta imagen de un elefante transportando un obelisco como símbolo de que la sabiduría que se sustenta por una gran cabeza(la del elefante).
“Sapientis Aegypti/ insculptas obelisco figuras/ ab elephanto/ belluarum fortissima/ gestari quisquis hic vides/ documentum intellige/ robustae mentis esse/ solidam sapientiam sustinere” (Estos símbolos de la sabiduría de Egipto que ves grabados en el obelisco que sostiene un elefante, el más poderoso de todos los animales, son la prueba de que es necesaria una mente fuerte para sostener una sólida sabiduría)
Aunque el diseño es de Bernini, posiblemente fue el taller de este el que la esculpió, en especial Ercole Ferrara(1610-1686), uno de los mayores exponentes del barroco romano. Si vais a Roma, no os perdáis esta preciosa obra.
Víctor Yuri de Torres Monroy
Deja una respuesta